La meditación guiada es una herramienta que permite, mediante palabras e imágenes, dejar de lado emociones negativas como el dolor, el estrés y las preocupaciones del día a día, ayudándonos a conectar con nuestro interior.

Esta técnica ha ido volviéndose cada vez más popular. Por un lado, por la necesidad de manejar el estrés de la sociedad actual y, por el otro, por el hecho de ser una herramienta fácilmente aplicable en el día a día con la ayuda adecuada.

La forma en que se realiza la meditación guiada es bastante simple. Una persona que actúa de guía en meditación, se encarga de ofrecer una serie de instrucciones para ayudar a las personas interesadas alcanzar un estado de relajación.

Con su conocimiento experto, quien dirige la meditación ayuda a enfocarse hacia las metas personales de quien acude a él. Estas metas pueden ser un mejor estado emocional en general, la aceptación de una situación en la que no se tiene control o preparación psicológica hacia un objetivo concreto. Es por este motivo que es muy recurrida en el entrenamiento de deportistas de élite.

Mediante el uso de esta técnica se puede lograr que la persona alcance el bienestar, gracias a que contribuye a alcanzar un estado de calma y otorga satisfacción mental y corporal. Además, si se usa adecuadamente, repercute positivamente en la salud tanto física como psicológica.

Algunos de los beneficios que suponen las meditaciones de este tipo son:

  • Reforzar el sistema inmunológico.
  • Mejora de las capacidades cognitivas: memoria, concentración, atención…
  • Mayor resiliencia.
  • Estabilidad emocional.
  • Mejora en enfermedades como hipertensión, cáncer, fibromialgia, asma y problemas cardiovasculares.